26 Ene Autismo y adolescencia vol. 1
La adolescencia es una etapa de cambios, que también puede ser difícil para los preadolescentes, adolescentes y familiares de personas con autismo.
Anticiparlos a los cambios propios de la pubertad los hace estar más familiarizados con lo que van a experimentar y puede reducir los niveles de ansiedad.
En las chicas explicar el proceso de menarquía (primera menstruación) los cuidados, aseo y el uso de las toallas sanitarias. En consulta sugiero a los familiares que desde temprano le digan “tengo que ir a comprar toallas sanitarias” así trabajamos habilidades de la vida diaria y la importancia del autocuidado. Existen aplicaciones como “Mi calendario de menstruación” para dispositivos que les recuerden su tiempo de período y puede ser una manera atractiva.
En los chicos tenemos que conversar sobre las primeras erecciones, como las pueden reconocer y lugares donde manejarlas.
A continuación pueden visualizar material de apoyo para abordar los temas con los adolescentes en familia o en la consulta: menstruación y masturbación masculina y femenina
Hablar de sexualidad puede ser difícil para cualquier padre y adolescente. Recordemos cuanto más sepa un chico o chica con autismo sobre sexualidad, más seguro estará.
No todos los adolescentes con TEA son iguales y por eso en la actualización del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) lo describen como espectro por ser una gama de diversidad. Sus características pueden estar relacionadas con las habilidades sociales, problemas sensoriales, dificultades para comprender, entender las conductas y emociones de los demás. Además, de intereses y fijaciones poco usuales.
En la adolescencia los padres pasan a un segundo plano y los intereses radican más en las amistades y salidas en grupo. En esta interacción se aprenden comportamientos o conductas que son socialmente apropiadas. Por eso con los chicos con autismo debemos enseñarles sobre comportamientos sexuales que pueden ser públicos y privados. Además, de los temas que se pueden hablar con sus compañeros. Ir preparándolos nos va dando ventajas en el camino.
Tenemos que dar los primeros y hablar del tema, porque muchas veces los chicos pueden buscar información en internet y las redes sociales.
¿Qué podemos hacer?
- Ser claros y precisos cuando vamos hablar de sexualidad, debemos usar los nombres de los órganos y conocer las expresiones que ellos manejan o los que están usando los adolescentes hoy en día. Pueden hacer un sondeo previo para conocer la información que ha recopilado en el colegio o en el barrio e ir aclarando dudas.
- Aclarar “está bien tocarse” y hay lugares privados para hacerlo. Si es necesario pueden anotar los nombres de los lugares. Algunos chicos se manejan por rutinas y pueden manejar las famosas “rutinas de privacidad”.
- Trabajar los límites personales y con los demás. En consulta trabajo los “permisos” te puedo “dar un abrazo” por “un saludo”, recordándoles que el saludo puede ser un “chotin” o alguna expresión gestual y que no siempre es un abrazo, porque los abrazos debemos pensar bien a quién se lo damos.
- Mi cuerpo se respeta y respeto el cuerpo de los demás. Hacer prevención y énfasis en el respeto de sus partes íntimas y las de otras personas. Agregaría hablar de “consentimientos”.
- Traducir la amabilidad puede parecer difícil, porque es delicada la línea para estos adolescentes comprender que cuando alguien es amable no necesariamente es que quiere que seamos “novios” o “le guste” aquí sugiero ver películas o series en casa y acompañarnos a distinguir las diferencias.
- Dentro de la prevención, hablar sobre el uso correcto del preservativo (masculino y femenino). Aclaro hablar de “condones” no necesariamente promueve el acto sexual, pero siempre es una herramienta de prevención.
A lo largo de la niñez se hace un entrenamiento previo en emociones, pero ya en la adolescencia entramos en sentimientos como el amor, que debemos tratar de explicar. Por eso podemos usar metáforas como “el amor se va construyendo”. Si muchas veces podemos sentir atracción, admiración por una persona, pero no necesariamente “estamos enamorados”. Por ejemplo, el sentimiento que tenemos a nuestros hermanos puede ser distinto al de los amigos o el sentimiento que tiene mamá hacia papá es diferente que el de mamá hacia un hijo.
Es importante conocer el perfil sensorial del adolescente es un gran aliado en todo cambio o trabajo que vamos a realizar, porque puede ser que le demos todas las estrategias y tengamos un plan de intervención muy eficaz, pero sensorialmente el roce, abrazos y sencillamente “tocar” les estimula sensorialmente, ir de la mano con un Terapeuta Ocupacional nos puede brindar herramientas o sugerencias para canalizar esta necesidad.
No es fácil hablar de sexualidad con los adolescentes y en ocasiones con los chicos con autismo puede ser todo un reto que conlleva investigar y en ocasiones buscar ayuda profesional para poder brindar una información de calidad.
Padres y familiares lo más importante es que podamos iniciar estas conversaciones previas a la pubertad para ir teniendo un avance en el camino hacia la adolescencia.
Si has llegado hasta aquí te dejo el material de apoyo que utilizo en la consulta…
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Dimas E. Villarreal P.
⚡️Psicólogo Clínico de niños y adolescentes/ Terapeuta
🖍Psicopedagogo
🤖Terapia de Juego
#HoyfuialPsicologo